Aquí les enseñamos el fenomenal ejemplar premiado el pasado concurso. Fue enviado por don Amelio Rossi y, como pueden comprobar, es la bonita artroscopia de la rotura transversal de un menisco.
No, no se preocupen, que don Amelio no ha sufrido lesión alguna. Él, que es muy cuco y muy estornino, mientras su pareja dormía bajó a la calle en busca del sereno y, al encontrarlo más bien ebrio, decidió sin pensarlo más de seis veces abrir con su llavín el quiosco de doña Gertru. Allí dentro, escondido entre los montones de Diez Minutos y los paquetes de Werther's Original, garabateó su célebre opúsculo "El polígono en pantalón corto" sobre el inquietante fenómeno del Triángulo de las Bermudas.
Casi inmediatamente se presentó en el quiosco el señor Alphonse Tjerty, de la Academia Sueca, para ofrecerle el premio Nobel, pero Amelio, sobresaltado por la nocturnidad y la alevosía, le atizó en la rodilla izquierda con un pintalabios de la señorita Pepys.
Al darse cuenta de su error, el bueno de Rossi se deshizo en disculpas cual aspirina efervescente y, viendo el desaguisado que había provocado en la articulación del sueco, agarró ni corto ni perezoso los anteojos de doña Gertru y, sirviéndose de cuatro ejemplares del coleccionable "Relojes de época" y de una aguja en un pajar, le hizo allí mismo a don Alphonse la artroscopia que hoy les presentamos.
Eso le valió para ganar el II Campeonato Interurbano de Artroscopias, cuyo premio no era otro que un viaje con todos los gastos pagados al Mar de Andamán.
Ya ven lo que hace la perseverancia, así que envíennos sus propuestas.
