viernes, abril 28, 2006
El vals de las mariposas.
Pues que esta noche nos vamos a bailar el vals de las mariposas.


La cosa es que vamos de boda. Las víctimas: un ferrolano y una siberiana.
Habrá ceremonia civil oficiada por el ex-arcipreste de Hita. Habrá cena-baile. Habrá filloas ferrolanas. Habrá ensaladilla rusa. Habrá vals de las mariposas. Habrá risas y lágrimas. Habrá copas. Habrá tijeras y corbatas. Habrá canciones ye-yé. Habrá primos y sobrinos. Habrá tarta con monigotes.
¿Y nosotros qué haremos? Henri bendecirá la mesa con una oración especial de su invención (no esperen mucho porque lo último que inventó fue el telégrafo, y ya está obsoleto); Amelio repartirá entre las señoras una especie de puritos enrollados que dice que son la monda y un servidor cantará a voz en grito ¡Viva la Constitución! ¡Y viva el Rey!
Como es de ley.
 
martes, abril 18, 2006
Gran pinchada frigorífica.
A cargo de lanevera61 dilleis.



Estarán pincha que te pincha el sábado 22 de abril a partir de las 12 de la noche en el Vauxhall de Vigo.
Starring:
Zarpaelamor dilleis (unos enamorados de la moda infantil-juvenil y las almendras garrapiñadas).
2muchobrodels (un guardia urbano y otro suizo, primos carnales de Azul y Negro).
Rubia dorada (una señora de felpa que nuncajamás habla alemán a no ser en defensa propia).
Kate (una biciclista con carné xove aficionada al debate de béisbol).
Y nuestro gran amigo y mecenas HENRI CHOCOLAT, que nos deleitará con piruetas y tirabuzones varios (no descarten algún que otro salto del ángel).
Y todo esto a mayor gloria del Festival Otros Mundos Pop. Acudan.
 
lunes, abril 17, 2006
Canción
Ya que está muy en boga, boga, mariñeiro eso de publicar las canciones con acordes para los fans...


Pues aquí les regalamos con el penúltimo éxito de misquious al que, aunque fue compuesto para silbato y bandoneón, pueden acompañar con su guitarra Academy de cuatro pesetas. Este es (muy sencillo ello):

Do#m Do#7 Resus9 Fa Do Si$ 3% Mi#Drcha. Sol

Colirio y Portugaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaal.

 
miércoles, abril 12, 2006
Nos hemos lavado la cara.
Es que la teníamos toda sucia como de andar por el monte de noche recogiendo frambuesas, grillos y empanadillas.
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Pues eso, que nos hemos lavado la cara en un regato pequeno y ahora estamos frescos como una lechuga camboyana.
Es que ya habíamos recibido muchas cartas y telegramas de personalidades del mundo español y de la España mundial (incluído Fernando Romay y su esposa) instándonos a que hiciésemos algo con nuestro look.
Pues ya lo hicimos, y a quien no le guste le recomendamos envíe una queja mecanografiada a triple espacio sideral al Defensor Público y Privado de la Manzanilla de Huelva y Hermanos (abstenerse ingleses y gente de poca fe). Ahí les darán razón de cómo protestar enérgicamente sin que se les note ni una miaja.
Pero, ¿a que les gusta, señoras?
P.D. Esta entrada se autodestruirá en 789.004.655 segundos Fahrenheit.

 
viernes, abril 07, 2006
¡Henri campeón mundial!
Fíjense, señoras, que esto es la monda.


El bueno de don Henri Chocolat acaba de llegar de Lille con un diploma bajo el brazo. Nada menos que uno que lo acredita como campeón mundial de imitación de jilgueros. ¡Ahí es nada!
Parece ser que la final estuvo muy reñida. Había un coronel checo que silbaba como los mismísimos ángeles (todo esto en palabras del propio Henri) y una cajera del Eroski de Manacor que cada vez que abría la boca se le llenaba de pajarillos (al final esto le pasó factura y le impidió ganar).
Estos dos finalistas ya habían oído hablar de las hazañas del bueno de Henri, así que no lo perdían de vista.

¿Qué hacer ante semejante vigilancia? Pues como nuestro amigo es un hombre de una genialidad espontánea y azul celeste, lo que hizo fue despistarlos mediante un disfraz.

Pero no era un disfraz cualquiera, no, era un fenomenal disfraz doble (ahí lo tenéis en la foto). El señor Chocolat pensó para sus adentros: "Si me disfrazo de jilguero, seguramente me conocerán, pero ¿qué pasaría si me disfrazo de mujer disfrazada de jilguero?"

Pues ahí estuvo el quid de la cuestión.
 
jueves, abril 06, 2006
Escuchando...
Fanny & Alexander.


Un dúo compostelano que acaba de publicar Lusco e fusco, ocho temas de los cuales os podéis descargar los cuatro que forman Lusco EP.
Me han gustado mucho, con toda esas influencias de Leonard Dobarro, The Postal Hood, Ludwig van Merritt y el chascarraschás electrónico.
Ah, por cierto, no dejen de escuchar a Vincent Jalo y sus machucos.
Boas noites e ata mañá.
 
lunes, abril 03, 2006
Conozcan a Arturas Filvit.
Arturas Filvit, alias Carlton Maizes. Boxeador ecológico.




Las leyendas de los indios Pueblo de Centroamérica, grabadas con mimo en los ladrillos de adobe de sus chozas centenarias, dicen que Arturas Filvit nació de un bostezo de la selva la noche en que tres feroces jaguares perdieron al mus simultáneamente. De eso hace ya mucho, y la selva lituana ya no es lo que era, así que supondremos que este fenómeno de la naturaleza vio la luz en Vilnius tras un categórico nihil obstat emitido a modo de beneplácito por monseñor Pánfilo de Narváez, dueño del mundo en aquella época.

Al soplar las tres velas de su tarta de cumpleaños, nuestro Arturas comprendió que esas dos palabras (soplar y velas) iban a ser el leit motiv de su carrera. Efectivamente, se enroló como grumete en un barco atunero y sin encomendarse ni a Ocaña aparejó rumbo a las islas Canarias con el único equipaje que le permitían sus setecientos baúles forrados de borreguillo.

No pescó más que una sardina malaya en las costas de las islas Cíes (hoy puede verse ese ejemplar en salmuera en el museo CBGB de Valdeorras), así que nada más desembarcar en Las Palmas, el capitán, todo un gentleman moscovita de bigotes lluviosos, lo despachó con una buena dosis de patadas en las axilas.

Tres semanas y media pasó nuestro héroe deambulando por las calles canarias sin nada que echarse a la boca (para él su sardina era sagrada, y así seguiría hasta el fin de sus días). Tan muerto de hambre se le veía, que los transeuntes se dirigían a él sacando sus juegos de ouija y sus patas de conejo. Todo un espectáculo.

El señor Filvit probó de todo: paragüero condestable, limosnero de salón, carpintero zurdo, filósofo a media jornada, televidente… En nada triunfó, así que, dada su tremenda envergadura, decidió ser boxeador.

Pero era esta una profesión que no casaba muy bien con su carácter afable y algodonoso, así que pensó que lo mejor sería suavizar lo de boxeador con algo más del gusto del populacho y las oenegés. Así es cómo llegó a ser mundialmente famoso como el boxeador ecológico o, lo que es lo mismo, el fenomenal Carlton Maizes.

El resto es historia, y la dejamos para los libros. Baste decir que hasta con los guantes puestos es capaz de tocar un do bemol en un bajo. Casi nada.